Desde hace más de cuatro décadas, una emisora de radio en la frecuencia 4.625 kHz ha desconcertado a radioaficionados y expertos por igual. Conocida como UVB-76, esta estación comenzó a emitir en 1976 un zumbido constante y repetitivo, que se mantiene hasta hoy. A lo largo de los años, han surgido muchas teorías sobre el propósito de estas transmisiones, pero hasta el día de hoy, sigue siendo un misterio sin resolver.
El zumbido que caracteriza a UVB-76 es su sello distintivo. Emitido las 24 horas del día, inicialmente repetía un sonido de 0.2 segundos de duración alrededor de 30 veces por minuto. En los años 90, este sonido cambió a uno de 0.8 segundos, variando su frecuencia entre 21 y 34 veces por minuto. Aunque la transmisión generalmente consiste en este zumbido monótono, lo que más ha intrigado a los oyentes son las ocasionales interrupciones con mensajes codificados en ruso.
Uno de los primeros de estos mensajes fue captado en diciembre de 1997, cuando una voz femenina declaró: “Ya UVB-76. 18008. BROMAL: Boris, Roman, Olga, Mikhail, Anna, Larisa. 742, 799, 14”. Este y otros mensajes en ruso, como uno transmitido en 2002 que decía “UVB-76, UVB-76. 62691 Izafet 36938270”, han hecho pensar a muchos que la emisora tiene un propósito militar, posiblemente para transmitir órdenes secretas a tropas o espías.
A lo largo de los años, la estación ha emitido sonidos inesperados, como fragmentos de música clásica. En 2010, por ejemplo, se escuchó parte de la sinfonía El lago de los cisnes, intercalada con una voz femenina que recitaba números del 1 al 9. Este tipo de interrupciones ha alimentado aún más las teorías sobre posibles mensajes cifrados o señales en clave.
La ubicación original de UVB-76 fue rastreada hasta un búnker militar abandonado en Povarovo, cerca de Moscú. Sin embargo, en 2010, los investigadores notaron un cambio de ubicación, aunque su nueva localización exacta sigue siendo incierta. Algunos creen que sigue bajo control militar, aunque su propósito exacto aún es un enigma.
Las teorías más populares sugieren que la emisora podría estar vinculada a operaciones militares rusas o incluso a un sistema nuclear de emergencia, activado en caso de una catástrofe global. Sin embargo, hasta el momento, ninguna de estas hipótesis ha sido confirmada, lo que mantiene el aura de misterio en torno a UVB-76.
Mientras tanto, la estación sigue activa, emitiendo su característico zumbido y ocasionalmente mensajes en ruso, desafiando a todos aquellos que buscan resolver su enigma. UVB-76 continúa siendo una de las grandes incógnitas del mundo de la radio, con su propósito y origen aún sin revelarse.